¿Para qué sirve la mostaza?
¿Sueles consumir con frecuencia la mostaza en tu dieta diaria?, desde Econoce os contamos cuáles son las propiedades, usos y beneficios más comunes de esta planta para nuestro propio bienestar, ¿nos acompañas?
A pesar de que se conoce más comúnmente por su utilización en el ámbito culinario y como especia en todo el mundo para activar y potenciar el sabor de determinados alimentos y aportar un toque picante a nuestros platos, lo cierto es que la mostaza es una planta anual utilizada durante siglos en el campo de la medicina griega, china y ayurvédica.
Como curiosidad, has de saber que solo después de que sus semillas se hayan triturado y entran en contacto con líquidos como el agua o la saliva es cuando la mostaza desata ese sabor fuerte tan característico y picante a nuestro paladar, mostrándose prácticamente inofensiva mientras tanto.
Propiedades de la mostaza
La mostaza, que podremos utilizar tanto como condimento como en compresas o emplastos, puede combinarse a la perfección con otros ingredientes como el ajo, el jenjibre, el aloe o la cebolla. De entre las muy diversas propiedades de la mostaza, podemos destacar las siguientes:
-La mostaza facilita la digestión y, más concretamente, la digestión gástrica.
-Al mismo tiempo es un excelente laxante natural, por lo que nos ayudará a mejorar nuestro tránsito intestinal.
-La mostaza también estimula el flujo sanguíneo hasta la superficie de la piel en casos de reumatismo, ciática, neuralgia y otros muchos dolores musculares.
-Además, la mostaza posee propiedades antisépticas y antivirales, defendiendo a nuestro organismo de las amenazas procedentes de muy diversos agentes externos.
-Esta planta también puede ayudarnos a tratar los tratornos digestivos, hipo, dolores de espalda y articulaciones.
-Igualmente, alivia los dolores leves y la rigidez muscular.
-Durante siglos se ha estado utilizando como ingrediente de emplastos para tratar resfriados de pecho y de tos.
Usos de la mostaza
En cuanto a los usos, como bien acabamos de especificar, la mostaza puede ser empleada en emplastos. Para ello, solo hemos de mezclar las semillas de mostaza pulverizadas con agua caliente y repartir esta pasta gruesa resultante en un paño.
Por otro lado, también podemos hacer uso del aceite de mostaza, que podremos rebajar con un poco de alcohol y usar como loción natural para tratar los dolores articulares, la circulación lenta o la artrosis.
También puede ser ingrediente principal de un baño caliente de pies, que además de ayudarnos a alejar el frío de nuestro organismo, es perfecto para bajar la fiebre en las enfermedades incipientes o tratar la congestión de sangre en la cabeza. Para prepararlo, hemos de poner un cuarto de tazas de semillas de mostaza en una bolsita de paño o un filtro de infusión de gran tamaño. Dejamos reposar en agua caliente durante unos cinco minutos y sumergimos los pies hasta que el agua se enfríe.
Has de recordar que no conviene abusar de la mostaza porque podría causar inflamación e irritación. En este sentido, no es aconsejable aplicar los emplastos de mostaza durante más de 10 o 15 minutos seguidos porque se podrían generar ampollas o irritación.
¿Qué os parecen a vosotros las funciones y usos de esta planta?, ¿sabías para qué sirve la mostaza?
Imágenes Cocinista, Taringa y Vitadelia.